
El ejercicio con el huevo energético
es un viaje de descubrimiento en el cuerpo. Establecemos una nueva relación y nos familiarizamos con una parte de nuestro cuerpo que desafortunadamente a menudo se asocia con muchos tabúes, vergüenza y dolor.
es un viaje de descubrimiento en el cuerpo. Establecemos una nueva relación y nos familiarizamos con una parte de nuestro cuerpo que desafortunadamente a menudo se asocia con muchos tabúes, vergüenza y dolor. Es un lugar lleno de poder creativo y curativo. Yoni, la palabra sánscrita para vagina, significa “lugar sagrado”. ¡Sé valiente y entra en este lugar sagrado con amor y respeto!
o demasiado pronto para descubrir la alegría del propio cuerpo, para explorar la belleza individual con todas las curvas, pliegues y misteriosas cavidades. Tocarse amorosamente, con ternura y con tanta intensidad que sentimos placer al hacerlo. Placer de más, de sentir más, de más vitalidad y fisicalidad natural. ¡Eso es bueno y saludable! Estos pasos esenciales en el camino hacia el amor propio nos permiten otorgar y compartir nuestro amor con los demás. Pero la fisicalidad es tan importante como nuestros sentimientos. ¿Te sientes bien en tu piel?
Con este ejercicio podemos obtener un bajo vientre cálido y vigoroso y desarrollar más sensibilidad en la vagina y el suelo pélvico. Utilizado de manera consciente y amorosa, el juego del huevo nos puede llevar a una nueva y saludable forma de tratar con nuestro cuerpo y a una sexualidad sana y natural. Todo lo que necesitas es una clara intención, curiosidad y el coraje para descubrir algo nuevo.
También podemos utilizar el huevo como una ayuda pélvica para el entrenamiento del suelo pélvico y poner el aspecto de la salud física y la funcionalidad en primer plano. La forma del huevo produce un reflejo muscular después de la inserción en la vagina. Con más contracciones musculares conscientes, el huevo se mueve hacia adelante y hacia atrás en el canal vaginal. Esta "gimnasia interna" ayuda, entre otras cosas, a fortalecer el llamado "músculo Chi" (pubococcígeo) y controlar su función.
El objetivo del ejercicio es mover el huevo hacia adelante y hacia atrás con los músculos del suelo vaginal y pélvico. Aprendemos a relajar conscientemente las diversas capas musculares. Esta es la base para apoyar la dinámica de estos músculos, porque a menudo el suelo pélvico es débil porque está totalmente tenso. Por supuesto, hay muchas otras razones para una debilidad en el piso pélvico.